El espacio también puede ser un negocio
| Además del interés de la agencias espaciales financiadas por los gobiernos de distintos países también algunas compañías privadas han mostrado interés en la exploración espacial. La empresa norteamericana TransOrbital ha visto en la Luna un excelente escenario donde captar imágenes que después puedan ser comercializadas ya sea para hacer documentales, películas o publicidad. La misión que están desarrollando se llama TrailBlazer. Un sonda partiría desde la base espacial rusa en Baikonur. Una vez en la Luna, la nave tomaría imágenes de alta resolución de la superficie selenita y del espacio. El proyecto también incluye la posibilidad de enviar cenizas de difuntos y mensajes de particulares. El principal inconveniente de esta excéntrica idea es su coste: 70 millones de dólares. Los directivos de TransOrbital quieren convencer a los posibles inversores afirmando que los ingresos que se obtendrán con las ventas de las imágenes serán superiores a esa cantidad. Su optimismo ha hecho que estén trabajando en las misiones Electra en las que unos vehículos viajarán sobre la superficie lunar para examinar los lugares en los que estuvieron los astronautas de la NASA. |
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Otra empresa interesada en explotar la atractiva imagen de nuestro satélite es Luna Corp. Su proyecto es enviar una nave de comunicaciones de banda ancha para transmitir en directo imágenes de la Luna con las que se hará un estudio geográfico detallado. Más adelante, sobre la superficie, un pequeño cochecito todoterreno recorrerá los terrenos cercanos al polo sur. El objetivo será confirmar la existencia de depósitos de hielo en las profundidades de los cráteres polares. Otros vehículos como el anterior se enviarían a lugares emblemáticos de la luna como la base del módulo en el que viajaron Amstrong y Aldrin. Más tarde visitaría las zonas del alunizaje de la sonda Ranger VIII , del Apolo XVII y del malogrado Luna 21. Las imágenes de estos ingenios se captarían por un equipo de alta definición. Los clientes: cadenas de televisión, museos científicos y agencias espaciales sufragarán los gastos.
Icebreaker Moon Rover es el cochecito
que inspeccionará la Luna en busca de hielo
