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LA LEYENDA DE LA PRINCESA ICO
El relato de la Princesa Ico es uno de los pasajes más controvertidos de la historia aborigen de las Islas Canarias. Nos llega este relato de la mano del religioso franciscano Fray Juan de Abreu Galindo en su única obra conocida "CONQUISTA DE LAS SIETE ISLAS CANARIAS".
Nos cuenta Abreu Galindo que en el año 1402 llegó a Lanzarote Juan de Bethancourt y Gadifier de la Salle y que por aquel tiempo reinaba en la isla conejera (se conoce popularmente como conejeros los nacido en la isla de Lanzarote) Guadarfía que era hijo de un capitán cristiano.
¿Como es posible que el rey de los mahos, nombres que reciben los aborígenes lanzaroteños, sea hijo de un capitán cristiano?. Intentaremos dar respuesta a este interrogante en las próximas líneas.
Abreu Galindo relata que en 1377 una embarcación encalló sobre las costas de Punta Grande en la ensenada de Las Caletas próximo al actual Puerto de Los Mármoles, en la capital de la isla de Lanzarote, Arrecife. Al frente del barco accidentado estaba el capitán vizcaíno Martín Ruiz de Avendaño. Por aquellos años reinaba en la isla Zonzamas, que acoge al capitán en su corte de Acatife, la actual Villa de Teguise.
En su corta estancia en la isla el extranjero mantiene relaciones sexuales con la esposa del rey, la Reina Faina. Que por otra parte nos la describen como una mujer de gran belleza. De estos esporádicos encuentros nacen una niña que llamaron ICO. El aspecto blanquecino de la recién nacida, contrasta con la tez morena de las mahos y esto es motivo suficiente para hacer pensar que la niña no era hija legítima de Zonzamas. Pero el rey zanjó la cuestión. El con su actitud atenta y cariñosa hacia la niña calló las murmuraciones. No debemos pasar por alto el extraordinario respeto que sentía el pueblo por su caudillo.
Zonzamas es descrito como un titán, de fuerte envergadura, atlético. Ropas hechas de piel de cabra y sus pies envueltos de cuero, típico calzado maho. Su cabeza tocada por una corona de piel y adornada con conchas marinas, simbolizaba el poder de la realeza isleña.
A la muerte de Zonzamas le sucede su hijo Timanfaya, pero en 1399 fue raptado con su esposa y 170 de sus súbditos por la armada de Gonzalo Peraza Martel para venderlos como esclavos en los puertos europeos.
A Timanfaya le sucede su hermano Guanareme que casó con Ico y que fruto de este matrimonio nació Guadarfía. Pero Guanarame fallece súbitamente. Es posible que fuera víctima de alguna enfermedad.
El consejo de nobles proponen que Guadarfía sustituya a su padre, pero muchos guayres, nombre que se le da a la nobleza isleña, no aprueban su coronación. El motivo es la presunta bastardía de su madre. Para cerrar el debate, el consejo de guayres deciden que Ico debe mostrar que es una autentica maha, para que su hijo puede calarse la corona de pieles y cochas.
La princesa debe pasar la prueba del humo. En realidad una trampa mortal. Es encerrada en una choza con cuatro de sus sirvientas. Al rededor de la choza varias hogueras envuelven con su humo la estancia. Si en la prueba, la persona muere es porque "el dios desconocido" la ha castigado por su falta. Si vive es porque la protege.
Ico sobrevive a la prueba mientras sus cuatros sirvientas mueren. Y los mahos entienden que si su dios la ha protegido es porque es inocente de los cargos que se le acusaba. Pero la razón por la que Ico sobrevive, no tiene nada que ver con ninguna divinidad. Antes de entrar a la choza una astuta anciana le entregó, en secreto, una esponja empapada en agua. Le recomendó que se la pusiera en la nariz y respirara a través de ella.
Al triunfar en tan difícil prueba, su hijo Guadarfía puede acceder al trono de Lanzarote, ya que su madre sí era hija de su abuelo, el Rey Zonzamas. De esta manera es como Juan de Bethencourt que inicia la conquista de la isla en 1402 tuvo que luchar con el noble monarca maho Guadarfía.
Sin embargo esta historia presenta notables contradicciones. Veamos algunas de ellas:
Por lo tanto ¿quién es en realidad Guadarfía?. ¿Cual es el rol de este personaje en tan embrollada historia?.
Buceando en la obra de Agustín Millares Torres "Historia General de Las Islas Canarias" nos encontramos con la referencia de la obra "Episodio de Avendaño, aurora histórica de Lanzarote" del autor Juan Álvarez Delgado. Este catedrático de la Universidad de La Laguna expone un nuevo punto de vista sobre la figura de Guadarfía.
Para este profesor, Guadarfía e Ico no son hijo y madre, sino hermanos de la misma madre pero de distintos padres. Guadarfía es hijo de Zonzamas e Ico de Martín Ruiz de Avendaño. Esta es la razón por la que la princesa tiene que pasar la prueba del humo y al superarla eliminó el estigma de extranjerismo de su hermano y de esta manera subir al trono. Es posible que bastara una conexión indirecta entre heredero al trono y el extranjero para que impidiese su reinado.
Interesante punto de vista que abre nuevos horizontes para encontrar una explicación más congruente que la ofrecida por Abreu Galindo.
Existen otros posibles explicaciones tan apasionantes como las anteriores. Se sabe que a los pocos años del nacimiento de Ico, la pareja real Zonzamas y Fayna mueren. Su muerte no causa extrañeza. Indicio de que ambos eran de edad avanzada y por lo tanto sería difícil que Fayna fuera fértil cuando llegó el capitán vizcaíno a la isla. A parte que causa extrañeza que la reina accediera a tener relaciones con un desconocido, por motivos de algún amorío frívolo. Ni mucho menos hay constancia de que las mujeres aborígenes ejercieran la poliandría.
¿Acaso no sería probable que Martín de Avendaño no tuviera relación con la reina Fayna, mayor por aquel entonces, y si las tuviera con la princesa Ico?. ¿Que como fruto de este encuentro naciera Guadarfía?. De esta forma Guadarfía si sería "hijo de un capitán cristiano" como nos contaba Abreu al comienzo del relato. Al quedar el trono vacante por las muertes de los reyes, se convirtió en un aspirante inesperado. Pero su origen extranjero era un impedimento para subir al trono. Por este motivo, su madre tuvo que demostrar que por las venas de su hijo corría sangre maha, superando el sacrificio del humo. Si esta hipótesis esta en lo cierto, en 1378 nació Guadarfía, y para la invasión de 1402 ya tendría 24 años. Coincidiendo con las descripciones normandas de este personaje. Un hombre adulto y de gran fortaleza.
